Excuse moi. Excuse me .

Tu figura zigzagueando pone alas a mi mente. Recuendo tu lengua y cómo fue que se durmió. Regreso al presente, condicionada por dichos recuerdos, nostalgias.
Y yo a la espera de una excusa, y digo excusa (no digo verdad) porque decir verdad parece demasiado. No encuentro justificación alguna.
Si vamos a suponer... puedo suponer que mi alma sucumbe ante tu actitud... temblorosa no es capaz de tomar coraje y empezar de nuevo.
Creo en el tiempo porque decir que creo en mí a veces no basta.
Tengo un dulce pero momentáneamente estoy empachada de tanto dolor.

Una noche de pintura al óleo .

¿Y qué es eso que llaman soledad? . Yo sé lo que es estar en compañía de mi mente, conversar con mi alter ego... debatir con mi super yo.
Conozco la complejidad de las relaciones humanas... por eso elijo melodías .

El arrepentimiento no es el único sufrimiento .

Veo tu alma esfumarse en un suspiro, en un intento de grito desgarrado que se evapora en las penumbras del silencio.
Veo tu figura marcharse, alejándose de mi vista y ya no puedo contemplarte.
Las nostalgias, el desconcierto.
Por los dioses del Olimpo, no puedo desprender tu perfume de mi almohada .
De a ratos, tu voz resuena en mi cabeza...
Razón versus sentir...
Exalaré, y con mi aire enviaré un beso místico directo a tus pensamientos... he allí donde deben fusionarse. Un torrente de amor para llenar esos vacíos .